La
Ley 20.500 sobre Asociaciones y Participación
Ciudadana en la Gestión Pública ordena
implementar las siguientes medidas:
a) Normas de Participación Ciudadana
b) Creación de una Unidad de Participación
Ciudadana en cada repartición
c) Consejos de la Sociedad Civil (COSOC)
d) Cuenta Pública Participativa en cada repartición
e) Registro Nacional de Personas Jurídicas
sin fines de Lucro.
Componentes
Ley 20.500
Fuente: Cuenta Pública Participación
Ciudadana. SUBDERE. 2015.
*
Ilustración de elaboración propia.
Permitida su reproducción indicando fuente:
©Exhi.CL
La
Ley 18.515 De Bases Generales de la Administración
del Estado en su Art 74 establece: “Los órganos
de la Administración del Estado deberán
establecer consejos de la sociedad civil, de carácter
consultivo, que estarán conformados de manera
diversa, representativa y pluralista por integrantes
de asociaciones sin fines de lucro que tengan relación
con la competencia del órgano respectivo.”
Para
la operatividad de esta instrucción a nivel
de gobiernos regionales, la Subsecretaría
de Desarrollo Regional y Administrativo, creó
el Programa de Participación Ciudadana en
los Gobiernos Regionales “INCIDE”, que
plantea como uno de sus objetivos específicos:
“Promover la creación de los Consejos
Regionales de la Sociedad Civil conforme a la agenda
de descentralización.”
En
Chile, el concepto de participación ciudadana
ha sido largamente discutido, en particular a partir
de la iniciativa presentada a los legisladores en
2004 sobre “normas relativas a la participación
ciudadana en la gestión pública”.
En
la Cuenta Pública de Participación
Ciudadana en la Gestión Pública 2014-2015,
del Ministerio Secretaría General de Gobierno,
consigna
que existe consenso en que “la participación
ciudadana se encuentra estrechamente vinculada con
los derechos políticos, que constituyen el
núcleo vital de la ciudadanía en tanto
condición activa, y el componente dinámico
de todo sistema de gobernabilidad democrática.”
Se cita a María Laura Eberhardt quien tras
una extensa revisión bibliográfica,
define participación ciudadana como “toda
acción individual o colectiva que pretende
provocar/producir -de forma directa o indirecta-
algún tipo de resultado político en
los distintos niveles del sistema político”.
En
cuanto a la clasificación y tipificación
de la participación ciudadana, existen diversos
autores que presentan algunos modelos. La OCDE por
su parte, ha definido tres tipos de acciones participativas:
En
la relación gobierno – ciudadanos,
pueden darse diferentes grados de intensidad participativa,
siendo un análisis crítico el presentado
por la norteamericana Sherry Arnstein(1) hace casi
medio siglo atrás, en la “escalera
de la participación”:
1- Manipulación: es una forma ilusoria de
participación, que significa su distorsión
para convertirla en un instrumento de relaciones
públicas de los poderosos/autoridades…
En este proceso los ciudadanos no son correcta y
cabalmente informados, ni tampoco consultados de
manera adecuada.
2- Terapia: … se permite que las personas
se desahoguen, como una suerte de ‘catarsis’
de sus frustraciones y molestias….
3- Información: … un primer paso importante
para una legítima participación ciudadana,
[siempre que no se establezca] un canal unidireccional
por el cual fluye la información de las autoridades
a los ciudadanos, sin un canal para la réplica
y los comentarios, ni poder alguno para negociar…
4- Consulta: se crea un espacio para invitar a los
ciudadanos a expresar sus opiniones pero, si no
se combina con otros modos de participación,
no se ofrece ninguna seguridad de que sus preocupaciones
e ideas serán tenidas en cuenta ….
5- Apaciguamiento: … se comienza a entregar
algún nivel de influencia, pero en buena
medida pervive la lógica de una “participación
simbólica” de los ciudadanos. ….
6- Colaboración: … el poder es redistribuido
a partir de una negociación entre los ciudadanos
y las autoridades/poderosos; las reglas que se acuerdan
no pueden ser modificadas de manera unilateral.
…
7- Poder delegado: … los ciudadanos logran
un predominio en el proceso de toma de decisiones
sobre un programa o plan. … obtienen la suficiente
capacidad para garantizar que dicho plan o programa
… sea adoptado e implementado.
8- Control ciudadano: los ciudadanos … Están
a cargo, por completo, de la política y la
gestión del programa o institución,
y tienen el poder de negociar las condiciones en
las que los “ajenos” pueden hacerle
cambios.
La
autora califica como una participación efectiva
y genuina los estadios de colaboración, poder
delegado y control ciudadano.
Más
recientemente, el escocés Scott Davidson(2)
desarrolló en 1998 la “rueda de la
participación” para contrarrestar las
limitaciones de la metáfora de la escalera,
y de esta manera, “promueve el nivel adecuado
de involucramiento comunitario para lograr objetivos
claros”, según el propósito
de la autoridad sea informar, consultar, lograr
la intervención- o el empoderamiento de los
ciudadanos.
La
rueda de la participación de Davidson
(Fuente: Davidson, Scott, “Spinning the Wheel
of Empowerment”, Planning, Vol. 1262, April
1998, pp. 14-15. Citado en estudio de Ferrero y
Hoehn. Traducción y diagramación propios.
© Exhi.CL)
Participación
ciudadana en la gestión pública
Asimismo, en consideración al balance que
entrega la Cuenta Pública de Participación
Ciudadana en la Gestión Pública 2014-2015
del Ministerio Secretaría General de Gobierno,
la evolución de la implementación
de la Ley 20.500 y del Instructivo Presidencial
Nº 007, del 6 de agosto de 2014, ha sido positiva.
Participación
ciudadana en la gestión pública
Fuente: Instructivo Presidencial Nº 007,
del 6 de agosto de 2014.
*
Ilustración de elaboración propia.
Permitida su reproducción indicando fuente:
©Exhi.CL
La Ley 20.500 dispone cuatro mecanismos obligatorios
para todos los órganos de la Administración
Central del Estado: Acceso a la Información
Relevante, Cuenta Pública Participativa,
Consulta Ciudadana y Consejo de la Sociedad Civil,
modificando la Ley Nº 18.575 Orgánica
Constitucional de Bases Generales de la Administración
del Estado y la Ley Orgánica Constitucional
de Municipalidades, para su implementación.
Por su parte el Instructivo Presidencial dispone
la creación de Unidades de Participación
Ciudadana en todos los organismos del Estado y propuestas
de nuevos mecanismos de participación ciudadana
en la gestión pública.
El
balance de la implementación a diciembre
de 2015 presenta altos grados de implementación:
• Acceso a la Información Relevante.
99% de las instituciones públicas dispone
de información actualizada sobre sus políticas,
planes, programa y servicios, a través de
diversos canales de información y comunicación
de carácter presencial y virtual.
• Cuenta Pública Participativa. 96%
ejecutó esta actividad, realizadas mayoritariamente
en regiones (86%).
• Consulta Ciudadana. 69% de las instituciones
realiza consultas ciudadanas, principalmente de
manera virtual (49%).
• Consejo de la Sociedad Civil. 74% de las
instituciones públicas reporta tener constituido
su Consejo. De éstos, 57% han sido constituidos
mediante elección, 7% por homologación
y 36% por designación.
• Nuevos mecanismos de participación
ciudadana. 61% ejecuta otros mecanismos de participación
ciudadana.
• Actualización de Norma de Participación
Ciudadana. 83% había a la fecha del informe
actualizado su Norma.
• Unidad de Participación Ciudadana.
55% cuenta con dicha Unidad (UPAC).
Si
bien el balance es positivo, el Ministerio en su
análisis enfatiza que la sola implementación
de estos mecanismos no es en sí suficiente,
siendo el objetivo a alcanzar una participación
ciudadana efectiva.
Objetivos estratégicos de la
participación ciudadana en la gestión
pública
Fuente: Instructivo Presidencial Nº 007, del
6 de agosto de 2014
*
Ilustración de elaboración propia.
Permitida su reproducción indicando fuente:
©Exhi.CL
Estimular
la participación ciudadana
El Manual de Participación Ciudadana, publicado
por el Ministerio de Desarrollo Social (3) en relación
a la difusión y convocatoria del proceso
señala que “no debe dejar fuera a ningún
actor o grupo interesado en el instrumento de política
pública en cuestión”. En relación
a los medios a utilizar, la División de Organizaciones
Sociales recomienda que las “Instituciones
públicas tienen un rol activo de difusión
y entrega de la información mediante el uso
de los más diversos medios y estrategias.
En esta perspectiva, la promoción de información
hacia la ciudadanía debe ser constante y
para lo cual se pueden utilizar distintos tipos
de instrumentos y /o dispositivos”
Baja
participación ciudadana
El estudio de la OCDE Scan report on the citizen
participation in the constitutional process (2017)
indica que Chile tiene un “bajo nivel de participación
ciudadana y por la baja confianza de sus ciudadanos
en las instituciones públicas”. (4).
El estudio señala lo limitada de la participación
ciudadana consignando que sólo un 49% del
padrón electoral votó en las elecciones
generales de 2013. En cambio en las elecciones municipales
de 2016, la tasa de participación fue de
34,9%.
Experiencia
de campo
Desde la experiencia práctica en diferentes
proyectos de participación ciudadana, se
han podido identificar los siguientes factores a
considerar.